¡Carnaval!
Todavía no.
Sigue con tu máscara.
Solo unas horas,
un día,
todo lo más...
una vida.
A veces algo de lo que pasa por la vida se filtra en este blog. Otras veces es la fantasía la que se da una vuelta. El formato corto predomina pero siempre hay excepciones.
No,a mi no me gustan las máscaras. Si es necesario,las arranco con los dientes.
ResponderEliminarTampoco a mi me hacen mucha gracia pero tengo que reconocer que a veces... tienen su punto. Eso si, unas horas, un día, llevarla constantemente puede ser que la vida sea un desperdicio. En ese caso, lo de arrancarla con los dientes es muy violento para mi, solicito que se la quite, si la mantiene... no hay más solicitudes. Ya puede hacer lo que quiera con su vida, pero lejos de la mía.
ResponderEliminarPor supuesto, tu actitud es muchísimo más inteligente que la mía. La diferencia es que cuando descubro que en realidad era una máscara, si inmediatamente no se retracta, le exhibo en la plaza pública.
Eliminarno me gustan las máscaras, pero me gusta dialogar con el enmascarado y saber el porqué de la máscara ;P
ResponderEliminarEsa es una actitud coherente. Saber entender a los demás o al menos intentarlo.
EliminarPues si es capaz de aguantar su máscara una noche más... yo me daba por satisfecho. Al menos, un último amanecer.
ResponderEliminarUna noche de "mascaras" esta bien. Luego... cada uno que se la quite al salir de la cama.
Eliminarpues a mi no me gustan las máscaras, al menos en ese sentido..... asi se a lo que atenerme...
ResponderEliminarA mi tampoco, al menos mucho tiempo.
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