El día intenta encabronarse conmigo.
Trece horas de curro,
¡hoy me tocan trece horas!
La lluvia no para,
y parece que los pantanos,
en lugar de agua,
desembalsan imbéciles.
Estos llevan un curso distinto a los ríos
y cuando se desbordan anegan la estación.
El día intenta encabronarse conmigo.
Pero ella se empeña en lo contrario.
Hoy el Sol sale a las nueve de la noche.
Él
Hace 2 horas