Felizaño, felicesfietas, ojalatodovaya bien... ¡Bah! Al final nos parecemos a una de esas beatas que se dan golpes en el pecho con el abanico mientras recitan de memoria las oraciones pertinentes. Tanto pensar que no seríamos como ellas y nos hemos convertido en lo mismo. Solo que en vez de ir misa que era lo que se hacía antes, nos arreglamos o desarreglamos para hacer hacer lo mismo que ellas, retener una retahila en la cabeza, en el móvil, mandar memes felicitatorios y besos por whatsapp. ¡Nos hemos convertido en la beata de iglesia!
Y yo no voy a ser menos. Te deseo cositas wenas siempre que lo que te sea bueno para ti no me joda a mi. Espero que encuentres una canción favorita nueva, que folles mucho, con quien quieras y quieran hacerlo contigo. Que comes y no te engorde, Que encuentres un libro que te haga llorar y tengas risas todos los días. Que pienses en las retahilas y las costumbres que tienes por si merecen la pena o no, y si no lo merecen a tomar por culo, siempre que te jodan por que si a ti te gustan... ¡que se queden! Que no te tengas que arrepentir del 2023 y llegues vivo a la siguiente nochevieja.
Que coño, que te vaya bien, y a mi mejor.