4/7/15

Atraco.


Habían paseado durante un rato y ahora se sentaban juntos en un banco. Al poco de estar allí, un lugar apartado en el parque, los dos novios se encontraron sorprendidos por un personaje que acercándose y mostrando una navaja les dijo:
  • dametoloquetengas, dametoloquetengas – repitió nervioso mientras movía la navaja.
El chico dándole la mano a la novia y mostrando interes en el atracador solo acertó a decir:
  • ¿Queee?
  • Quemedestoloquetengas – volvio a insistirle acercándole la navaja.
  • ¿Qué te de que? – preguntó de nuevo el chico más curioso que asustado.
  • Toloquetengas, venga – le apremió el asaltante, mientras ahora se pasaba la navaja de una mano a otra y se secaba el sudor de la palma en el pantalón.
La novia del chico se acercó más aún al ver el movimiento de la navaja que ahora se encontraba más cerca de ella.
  • ¿Pero tú estas loco? ¿Tú te crees que si tuviera pelas iba a estar aquí pelando la pava? ¡¡Con el frió que hace!!
  • Losanillos, lascadenas, loquesea, que tengoelmono y soy capaz de... de... venga.
El chico se levantó del banco y sacó el forro del bolsillo derecho con las llaves.
  • Mira tío, ves que no llevo nada ¿no? – le increpó al atracador – La cadena es de cuero y el reloj es de los que dan con el periódico.
El yonki se volvió rapido hacia la novia y le dijo:
  • Tú, losanillos, damelos.
La chica asustada intentó desprenderse de ellos pero nerviosismo no la dejaba quitarse ninguno.
  • Pero tío, no ves que son del mercaillo. – le contestó el chico- Si lo sabré yo que se los regalé.- Puso una mano en el hombro de la chica intentando tranquilizarla mientras miraba al yonki.
El asaltante, miraba de un lado a otro, volvía a cambiarse la navaja de mano y se secaba ahora la otra palma.
  • Mira tío – le dijo dando un paso hacia el atracador – fijaté en aquellos dos. El tío con un chaqueta de ante, y la niña pijita que no se ha quitado el uniforme del colegio. A esos le sacas lo que quieras pero es que nosotros estamos tiesos. Lo siento.
El yonki miró a la pareja que le señalaba y volvió la vista hasta sus primeros asaltados. Vaciló un momento y por fin se dirigió hacia la pareja de pijos.
  • Que miedo he pasado – dijo la chica al ver que se alejaba.
  • Venga Laura, rapidito que he cobrado hoy y no me he llegado al banco, pero como este tío se fije un poco mejor en tú anillo nos pincha, seguro.

Los dos dejaron rapidamente el banco y salieron del parque, mientras en el otro lado unos jóvenes bien vestidos levantaban las manos al ver una navaja.

6 comentarios:

  1. No hay que fiarse de las apariencias ni para hacer maldades!
    Un beso

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  2. Las apariencias engañan mas que un político en campaña. Vamos aprendiendo a no confiar en ellas al hacernos mayores, que lástima que con los políticos parece que algunos no aprenden.

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  3. de esos casos ha habido muchos! ....

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    1. Seguro que tú conoces alguno. Los patos, antes, era centro abonado para tales menesteres.

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  4. de esos casos ha habido muchos! ....

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  5. de esos casos ha habido muchos! ....

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