por ser nuestro patrón
nos guíe en el encierro
dándonos su bendición.
Viva San Fermín.
De Córdoba a Cordovilla. Ocho ocho horas de coche ininterrumpidas para llegar a Pamplona. Cuando por fin encontramos la casa de Carlos, él no estaba. Lo encontramos al día siguiente durmiendo en uno de los jardines de La Taconera. Después, toda la noche de jarana antes de entrar al piso. A las seis de la mañana cuatro tíos en el cuarto de baño maqueándose de blanco para correr nuestro primer encierro. La idea era hacerlo en Estafeta, una carrerita rápida y al acabar... a la cama. No se quien decidió brindar antes del encierro en el Iruña antes de comenzar. El caso es que cuando terminamos y nos dirigíamos al vallado ya lo estaban retirando.
Premio III Concurso Fotografía Erótica de San Fermín. |
Tres días en Pamplona y no vi ni un asta de toro. Eso si, cuernos y pitones...
como si mayo no te bastase y te apuntas a San Fermines....
ResponderEliminarSon historias de viejo Juana. Hace años que no piso Pamplona. Ni tiempo y... (casi si me apuras, ahora mismo)ni ganas.
ResponderEliminarEl Iruña es de los cafés más horteras que conozco.
ResponderEliminarBueno, pues nada. Que se diviertan. A mí se me pasó el arroz para esas cosas.
ResponderEliminarClásico Tesa... el Iruña es clásico, no hortera. Que me recuerdas a alguna gente que dicen que las tabernas son cutres.
ResponderEliminarSr. Rick... Creo que a mi tambien, creo.
a mi tb, se me pasó el arroz.
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