A veces algo de lo que pasa por la vida se filtra en este blog. Otras veces es la fantasía la que se da una vuelta.
El formato corto predomina pero siempre hay excepciones.
8/1/11
Lápiz.
Era cierto: El lápiz era mágico y antes de acabar el dibujo la chica apareció voluptuosa, sensual. Tal y como él la quería. Cuando acabó le provocaba desde la mesa del escritorio. Fue entonces cuando se dio cuenta de su error. Quince centímetros de mujer, dan para muy poco.
No creas, siempre se puede vender a Disney.
ResponderEliminarSi es que no estás a lo que estás. Demasiada prisa, demasiada imaginación, y luego pasa lo que pasa.
ResponderEliminarquizás así le de menos problemas que de tamaño real....
ResponderEliminarPues 15 de hombre...dan para bastante.
ResponderEliminar:P
Fiebre, me lo has quitado de las teclas ;)
ResponderEliminarMenda... vender ¿el lapiz? ¿o la tía?
ResponderEliminarPaseante... eso es cierto. Estoy en babia.
Juana... problemas dan siempre. Al final me vendrá bien la manta.
Fiebre, Charlotte... Vale. Sin comentarios.
Eso es lo que pasa por no pensar antes las cosas!
ResponderEliminary estoy con fiebre y charlotte, 15 centímetros de hombre no están nada mal :P
jajaja
ResponderEliminarIba a escribirte lo mismo que Fiebre, menos mal que he leído antes los comentarios.