- Me da una camisa para pijos.
La que habla así es Silvia. Lleva unos años de no entrar en el Corte Inglés pero esta vez está decidida. La segunda planta, la de caballeros, es su destino. En frente tiene a un vendedor con camisa impoluta, traje y una corbata a juego que la mira sorprendido.
- Ummhh ¿Cómo? – Le responde.
- Vera, es que hice una apuesta y tengo que comprar la camisa más pija para el tipo con el que la he perdido. Por eso le digo. Yo nunca la compraría. ¡Válgame Dios! ¡Aunque yo no creo en Dios! ¡Eh? Se vaya usted a creer que una es una beata confesa. ¡No! Lo dicho… lo que quiero es la camisa más pija que tenga. Pero no esa del cocodrilo que tienen todos. Estaba buscando más una con caballos. Que parece como más pija ¿no?
El dependiente entonces la lleva a una zona donde se encuentran varias marcas. A Silvia no le suena ninguna pero ve un logotipo que tiene un caballo y un tipo con un martillo encima. Esa se la ha visto a uno de los abogados con los que trabaja y decide irse para esa zona.
- ¿Esta es pija, verdad? – Le pregunta al dependiente señalando una.
El señor se encoje de hombres y hace un gesto entre afirmativo y de sorpresa. A veces mira a los lados por si es la broma de algún compañero y pone fin a la angustia que siente ahora.
- Pues me la llevo. – Decide rápida, está notando que le pica el cuerpo en ese ambiente.
- Y… ¿la talla? ¿Es esta?
- Uyss. ¡Es cierto!. Pues… es como yo más o menos.- Entonces decide mostrarse completamente al dependiente abriéndose el abrigo y dejando ver unas piernas increíbles y un tipazo escultural. Por primera vez el dependiente sonríe. Y acercándose a ella le sostiene a su altura la camisa.
- ¡Le quedaría como un guante! – Le comenta zalamero.
Y Silvia tarda “cerocomados” en pagar la camisa y salir corriendo del Corte Inglés. No sin antes limpiarse las botas en el felpudo de salida como si tuviese un chicle pegado y guardar la bolsa en otra de tela del Carrefour.
Esas camisas son el mal!!!!
ResponderEliminarjajaja que bueno, a mi me da alergia comprar en el Cortes Inglés, que agobio.
ResponderEliminarSaluditos
Jajajajajajaja
ResponderEliminarVaya la "Silvia" esta, es la polla, jajajajajajajaja
Pobre Silvia, lo que ha debido de sufrir. Y feliz dependiente, que además de hacer una venta se ha alegrado el ojo para todo el día.
ResponderEliminarSiempre gana el capitalismo, está claro.
Irene... el mal es un hortera que no sepa llevarlas.
ResponderEliminarNikita... a mi donde me da repelús comprar en en el Lidl. El Corte Inglés esta bien, caro pero bien. Y además es la hostia. Te dice cuando llega la primavera, el otoño, es mejor que Maldonado.
Iren... es la "re-polla". Jeje.
Paseante... además que seguro le alegró el día. ¡Tiene un tipazo la cabrona!
Jajajajaja genial!
ResponderEliminarMe encantan estas historias tan "reales"
no me van mucho las marcas pero tampoco me dan repelus, estoy contigo Bubo, me da grima el lid y el plus....
ResponderEliminarjajaj, yo no soy de marcas, pero para coraje el Día...me da grimilla entrar.
ResponderEliminarYo ni soy de marcas ni me llega para tales lujos, pero lo que no soporto son los empleados pelotilleros del corte inglés y tiendas similares.
ResponderEliminarPorque os dan grima los supermercados baratos¿?
Pues yo que quereis, a mi los Levi´s son de los pocos pantalones que me estan bien de largos. Pocas camisas me estaban bien de mangas así que las hacían en Artesanos Camiseros, ahora es más fácil encontrarlas y antes que estaba más "orondo" tampoco era complicado, pero ser alto y muy delgado sigue siendo un engorro para encontrar cosas. En el mercadillo no me puedo comprar unos vaqueros o una camisa, si acoso camisetas.
ResponderEliminarY los supermercados baratos no nos dan grima, a mi lo que no me gusta es no encontrarme las cosas que quiero y que los productos estén medio tirados.