Me duemo. Empiezo a escribir con la idea de mover los dedos, de tener la mente ocupada en cualquier cosa, aunque sea una chorrada de entrada solo para no volver a dar una cabezada. (Esos tres segundos de inconsciencia total están sumando algunos minutos y no puedo permitirmelo.)
Ayer, después de currar salí con algunagente de la estación para dar una vuelta por la Cruces. ¡Impresionante Córdoba! Aunque nos cayese un mantazo de agua entre cruz y cruz. Al fin y al cabo ¿para qué ponen las carpas? El caso es que acabé tarde y hoy el sueño no termina de irse. Lo peor es que me pilla en el trabajo y no hay manera de hacer el paripé y dormirse. (¡Joder, otra cabezada!)
Creo que no funciona mantener los dedos ocupados, voy a tirar de básicos: agüita en la cara y andar un poco. Pero es que voy a tener que hacerlo ya porque vuelvo a dormime.
yo si llueve no voy a ningún lado, ni siquiera al Góngora... y mira que allí dentro no llueve...
ResponderEliminarbesos.
A mi me da igual el agua. Lo primero es lo primero.
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