A veces algo de lo que pasa por la vida se filtra en este blog. Otras veces es la fantasía la que se da una vuelta.
El formato corto predomina pero siempre hay excepciones.
26/2/13
Los siete cabritillos.
- Tuvo suerte. - Le dijo el veterinario al lobo.- Casi muere ahogado, la cicatriz de la barriga sanará pero... toda su vida sufrirá de nefrolitiasis.
Le pregunté a mi chica cual era el cuento que más le gustaba. (Por cierto, debería haber un comentario de Devastiel, donde dice que no le gustaba ni pizca.)
jajaja y yo que pensaba que los cuentos que adapté a la diversidad familiar y sexual eran graciosos... pero esto mola más, pobre lobo, con lo que duele...
Efectivamente, nunca me gustó ese cuento, me parecía horrible. Pero bueno, ahora con este desenlace, está un poco más chisposo. El pobre lobo, que siempre termina abierto a la espalda cuál lubina. No sé qué pasó con los comentarios, que lo intenté dos veces y nada, no me admitía críticas el cuento jeje. Menudo término, uf.
te gustó el término médico y te apañaste la entrada?
ResponderEliminarLe pregunté a mi chica cual era el cuento que más le gustaba. (Por cierto, debería haber un comentario de Devastiel, donde dice que no le gustaba ni pizca.)
EliminarQué horrible me parece ahora el cuento.
ResponderEliminarAunque... ya me lo parecía antes :P
Buena entrada.
Jajajajaja, me ha hecho gracia pensar que en un cuento infantil, como la Caperucita, nos lo hubieran contado con términos técnicos! juaaaaa
ResponderEliminar- Ay abuelita, que pabellones auditivos más grandes tienes!
- Son para recojer mejor las frecuencias sonoras, mi niña...
jajajajajajajajaja
Jej. Es uno de los recursos que me gustan cuando no encuentro nada. Vover a escribir cuentos, en formato micro y con distintos tonos.
EliminarAnda Charlotte... marcate un post de un cuento.
jajaja y yo que pensaba que los cuentos que adapté a la diversidad familiar y sexual eran graciosos... pero esto mola más, pobre lobo, con lo que duele...
ResponderEliminarHabrá que buscar esos cuentos. Anda que no dan juego y versiones los cuentos.
EliminarEfectivamente, nunca me gustó ese cuento, me parecía horrible. Pero bueno, ahora con este desenlace, está un poco más chisposo. El pobre lobo, que siempre termina abierto a la espalda cuál lubina. No sé qué pasó con los comentarios, que lo intenté dos veces y nada, no me admitía críticas el cuento jeje. Menudo término, uf.
ResponderEliminar¿Tu te imaginas la guarrería de sacar a las cabras del estómago? Todas llenas de babas, de visceras, puaajjjj
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