21/5/14

Recicladores.

Las sombras lo ocultan. La noche es espesa, sin luna y solo es visible cuando la luz de un portal cercano se enciende. Con un rápido movimiento vuelve a hacerse invisible. Un tipo con zapatillas y gafas baja la basura. Se acerca al primer contenedor y tira una bolsa negra. Adelanta dos pasos, en el contenedor azul, arroja una pequeña bolsa de papel. Vuelve al portal antes de que la luz se apague. Cuando el portal deja de iluminar la calle el tipo entre las sombras sale. Con un paso firme se acerca al contenedor azul, mira a un lado, a otro y lo abre. Se encarama al borde, las manos cortas intentan alcanzar algo adentro. La tapa se cierra y el queda aprisionado. Las piernas se mueven como una pequeña cucaracha caída al revés. Parece recuperar el equilibrio y sale victorioso de su embite al contenedor. Una de sus manos sujeta con fuerza la bolsa de papel del tipo anterior. Nadie ha notado su presencia en la calle y con rabia dirige un puntapié al contenedor. El ruido es ensordecedor y comienza a correr por la calle como uno de esos locos que saltan y brincan por la victoria de su equipo en Champions.

Al llegar a casa el tipo abre la bolsa. Bolitas de papel caen sobre la mesa de un escritorio. Coge la primera, está arrugada y la lee por encima, después la segunda, la tercera. Las va colocando delante de él. En quince minutos tiene todo el escritorio lleno de papeles arrugados. Con tachaduras, con arreglos, con borrones. Papeles que el tipo parecía absorber como si le diesen la vida necesaria para subsistir.

Elige uno y comienza a escribir en un cuaderno que saca del cajó del escritorio. Frases, renglones, párrafos enteros mientras sonríe. Durante horas escribe sin ser consciente. Arranca papeles del cuaderno. Unos los dirige a un archivador, otros termina arrugados en la papelera.

Cuando acaba recoge los papeles del escritorio. Es tarde, muy tarde. Está cansado y se dirige a la cama. Entonces ve una bolsa en negra en la cocina. La recoge y vuelve al escritorio. Vacía la papelera en una bolsita de papel. Se dirige a la calle. Hace frio y no ha cogido nada de abrigo. Tarda menos de un minuto en tirar las bolsas de basura. Vuelve antes de que la luz del portal se apague. Está cansado, muy cansado. Y no ve a una sombra con zapatillas y gafas que se acerca mirando de un lado a otro de la calle antes de abrir el contenedor azul.

Foto de perfil.

Tercera cerveza de una reunión intrascendente de amigos que llevan tiempo sin verse. 
- Oye y de Mari Paz... ¿sabes algo?
- ¡No! Alguna que otra vez me ha enviado alguna cosa por el whatsapp pero no suelo hablar con ella. 
- Si, también yo la he visto en el grupo que montó erJezu. Alguna chorradita y poco más. 
- Yo también la he visto. La foto que tiene de perfil... ¿que es la de su hija mayor?
- Si.
- Si.
- Si. 

Y después todos se miran un rato y comienza una carcajada. 

P.D.- No está bonito hacerse pajas con las fotos de las hijas de las amigas. 
Foto sacada de un artículo muy curioso
de Marketing:
 http://marketing.blogs.ie.edu/archives/2007/09/marketing_viral.php

20/5/14

Abstinencia.

Que dice mi chica que no es necesario ir a la Feria para salir borracho de allí. Que digo yo que tiene razón. Que no pienso probar el alcohol en el Arenal este año. Con el tiempo que hace que no lo pruebo... a ver donde encuentro yo ahora farlopa. 

P.D. Recordatorio: Las drogas son malas. (En grandes cantidades.)

19/5/14

Creo que te quiero.

Después de una noche en vela. Con algún whisky de mas para darme el valor que no tenía. Fui capaz de decirle:
- Creo que te quiero. 

Y ese fue mi error.
 
Por que a ella no le bastaban las suposiciones. 
Necesitaba certezas. 

18/5/14

Sacapuntas.

Me he comprado un sacapuntas para afilar la  lengua. Que llevo días que se me queda espesa y ya no es de beber. Que ahora me la muerdo, de grande que se queda cuando tengo que sacarla a pasear. Que se me quedan los insultos y los "me cago en todos tus muertos" sin salir y se me está llenando como si fuese un condón reutilizado. 
Me he comprado un sacapuntas con una cuchilla de acero. Por si tengo que escupir que vaya bien atinado a la cara de quien lo merezca. Que las maldiciones no se queden en el camino y lleguen como cuchillo de carnicero a la yugular. 
Me he comprado un sacapuntas de los de metal. 
Y ahora, te vas a enterar. 

15/5/14

10 Olores

El café recién hecho.
Airear las sábanas de la cama que se han revuelto con las piernas y el sexo con ganas.
Jazmines secándose al lado en la mesilla de noche.
Mi vecina de regando sus macetas, y de paso las mías.
Las palomitas de maíz saltando.
Los bebes poco antes de llevarlos a pasear. 
El primer sorbo de un whisky solo con dos hielos.
Pasear por la ciudad de madrugada, sin resaca ni borrachera. 
La plancha con gintonic.


... y su risa. 





...

"Estamos aquí para reírnos del destino y vivir tan bien nuestra vida... que la muerte temblará al recibirnos."

Charles Bukowski.

13/5/14

Operación bikini #OFF

Me sobran kilos. No se como lo he hecho que lo menos tres o cuatro me están sobrando. Que si, que quien me conozca, (excepto las hermanas GG) dirá que estoy muy bien. Que donde voy a parar con las tonterías que digo. Pero la verdad es que me sobran lo menos cuatro o cinco. 
Empecé muy bien la operación bikini. Salí a correr. En mi primer día dí cinco vueltas al parque, casi diez kilómetros. ¡Que ya está bien! Se suponía que debía ponerme en forma para Semana Santa. ¡Estar fuerte! Eso de las salidas, las procesiones y el "paseito" con mi cofradía, demanda, si no una complexión atlética, si mentalización y una puesta a punto. Total que como había empezado de puta madre al día siguiente me fracturo la clavícula. ¡Mi gozo en un pozo! Baja en el curro y por su puesto inmovilización del brazo. ¡A tomar por culo el deporte y su puta madre! 
Después de una Semana Santa en la que al final no fue, o yo no lo vi, imprescindible el fortalecimiento físico, si el mental al menos para no atiborrarme de cervezas antes de las tres de la tarde, cayó un viaje a Fuerteventura. ¡La virgen santa como se come allí! No se si fue casualidad, la isla, o que hay familias que comen más que otras  pero yo terminé empachado día si, día no. Con lo que termino metiéndome en Mayo, con sus cruces, sus patios y su mal comer y mucho beber y ahora... ¿quién es el guapo que se mete en unas zapatillas para correr? ¿quién se pone hacer deporte? Pues eso. Que entre que el curro me tiene últimamente más liado, que tengo un examen pendiente para finales, que si un curso que empecé y me está costando seguir, y un montón de fiestas alrededor... ¡Chungo! 

Creo que voy a intentar mantener el tipo hasta junio y después... ¡Dios dirá! Además... si ya me lo dice todo el mundo (excepto las hermanas GG, y con tal de no verlas): ¡Que estoy muy bien!






P,D, ¡No! La foto no es mía. Pero podría serlo.

P.D.2. ¡No! No podría serlo. Yo no me pondría las braguillas esas. (Aunque quizá...)

6/5/14

Buenos días.

Abro la ventana. Los geranios me dan los buenos días. Me recuerdan que el sol empezará a apretar en breve. La hierbabuena campa desde que los mojitos se toman en la calle y el jazmín hace un mes que murió. El alohe crece si el piso fuese mansión y alguna paloma me dejó lo que piensa de mi en el alfeizar. 
La vecina dejó sus sábanas en la terraza. Sigue usando bragas negras. Preciosas. Un nene corre por la calle. Hoy llegará tarde a clase. Los del bajo están terminando su obra. Ya solo les queda pintar. Un ruido que termina por despejarme, ya han descorrido la segunda persiana del bar. Desde la radio Los Delincuentes dicen que su corazón no es de madera. El mío hoy, tampoco. 

3/5/14

El culo más bonito del mundo.

Nunca he tocado un culo sin pedir permiso primero. Sin que su dueña me hubiese dado licencia o lo hubiese dejado implícito con una mirada, un susurro, o una caricia en mi polla. Nunca. Excepto aquella vez. 
Quizá sería estrenando mis quince años, o poco mas tarde cuando subía por una de las calles céntricas. Una de esas calles bullangueras en las que nadie transita en ese momento, porque no son horas, por que el sol cae de plomo y el calor empieza a hacer mella en los paseantes ocasionales. Una de esas calles con un escaparate de zapatos y un toldo a media altura. Y bajo el toldo de Zapatería Noelia el culo más bonito del
mundo. A mis quince primaveras solo había estado con niñas escuchimizadas y románticas. El puto Bécquer con sus amigos  me habían hecho enamorarme varias veces de tipas flacas, esqueléticas, rubias todo lo más castañas, espigas doradas que parecían romperse si las abrazabas con fuerza. Por su puesto también estaba enamorado de Rita Hayworth, Gina Lollobrigida, La Loren, Ava Gadner y todas aquellas que mi padre me había transmitido con su ADN. El caso es que aquel culo, apretado bajo unos vaqueros, con toda la luz del sol brillando en él a las tres de la tarde y sus piernas tan bien complementadas metidas en zapatillas de deporte fue mi primera infidelidad al "amor cortés" de aquellos años. Pasaba de los libros de caballería a la picaresca en una calle del centro. ¡Y a plena luz! Así que cuando llegué a la altura de aquella terrible adoración no pude más que palmearlo. 
Al mundo le da por detenerse de vez en cuando, cinco minutos antes de salir del trabajo, cuando esperas una llamada importante, cuando el fontanero te dice que está llegando y ya mismo tienes arreglada la avería, y también cuando palmeas el mejor culo del mundo. Yo debería salir corriendo después de aquel palmetazo pero mis neuronas no paraban de regodearse en el gustazo que me produjo aquel encuentro instantáneo. No podían procesar esa satisfacción y la de enviar a mis piernas la orden de salir corriendo. Seguía recreándome en esa palmada, en ese culo duro, fuerte, apretado. Seguía ensimismado cuando una chica salió de detrás de la lona. Tocar el culo mas bonito del mundo se merecía una hostia en proporción. Y cuando la chica llegó a mi altura y mi mejilla esperaba el roce o el puñetazo, a esas alturas me daba igual, de su mano, me dijo sonriendo:
-¡BUUUBO! ¡Te esperaba mas formal! 
Fue entonces cuando me di cuenta. La conocía. Habíamos coincidido dos veces en casa de su primo Juan.  
- No lo he podido evitar. - Fue mi contestación, para seguir replicandole.- ¿Donde te metes? 
Y a partir de ahí una serie de palabras inconexas se fueron añadiendo a la parrafada con tal de seguir manteniéndola cerca. 
Ese día la acompañé a casa. También me castigaron por no llegar a comer a la mía y durante unas semanas dejé la alternancia de casas y solo estudiábamos en el piso de Juan. Coincidimos pocas veces más, las justa para poder confirmar hoy por hoy que el culo más bonito del mundo es de la prima de mi amigo Juan: Ana Lara. 


P.D.- Dos semanas estuvimos "tonteando" Ana y yo. Hasta que me di cuenta que el culo más bonito del mundo solo se ve bien desde una distancia prudencial. Muy de cerca pierde esplendor. 

1/5/14

El peluche


Después de el divorcio todos los peluches desaparecieron de la cama de aquel renacujo. Se fueron con él, con su madre, a otra casa, a otra vida, solo quedó un gorila verde, medio tuerto, que señoreaba por las mañanas, desde el trono de la almohada toda la habitación, por las noches seguía ocupando su función. Acompañar los sueños. Pero ahora, quien lo agarraba firmemente para evitar sus miedos, era el padre.