10/1/22

Netflix

Hace días que no me toca. Ni siquiera nos rozamos en la cama. A veces pienso que me está engañando con otra y me masturbo imaginandomelo. Pero entonces le veo la cara a la mujer con la que folla y soy yo. Me corto el rollo imaginarmelo conmigo. Antes no era así. Antes, las discusiones acababan en sexo, quizá con un poco mas de ira del que debería, pero bueno. Lo peor es que sé que no ho hay nadie mas. Que es solo la desidia la que se instaló en nuestra vida. 

A veces entro en su ordenador. Suele usar la configuración de incognito cuando entra en páginas porno pero se le olvida que soy informática. Mulatas, ebano, jovenes y trans, incluso trans. No puedo competir con eso. Y le reclamo en la cama, en la casa, en la vida. No hay manera. Se encierra en su caparazón, se atrinchera de armadura y mentiras. ¡No, mentiras no! Él no miente,. Omite, confunde, juega con la ironía, los sinónimos, usa todo el lenguaje, incluso el corporal para mostrate su verdad. Una que yo no entiendo.

Y estoy harta de sus palabras, de acostarme este invierno con frío y levantarme helada. De tragar como si fuesen garbanzos secos esas pildoras que susurra en el sofá intentando justificar que ya no hay nada mas en casa que nos una que una pantalla de televisión.

1 comentario:

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