22/10/25

Un día gris.

 Por fin un día gris. 

Un día sin colores. Sin el azul del cielo, sin los verdes limoneros que están cubiertos de niebla. Solo calles grises, y luces de coches que cortan el gris. Ropa gris, trabajo gris, gente gris. Para que llegue ella, y con una sonrisa abra el arcoíris y me joda mi tristeza. 

14/10/25

Anda jaleo...

 Hay jaleo en el trabajo. Hay follón con el hijo. Hay un malestar general instalado en la casa que ya me cansa. Así que este fin de semana he decidido echar todo eso fuera. No es tan dificil, solo que tienes que pelearte un poco contigo mismo. Empezar a evaluar situaciones, recordar que los problemas de verdad pueden venir sin avisar y que estos que me están rompiendo la crisma y quitando el sueño no le llegan a la altura del talón a otros que supimos afrontar con mas o menos dignidad. 

Así que he aprovechado varios días de descanso, después de doce días seguidos con 102 horitas en la estación, ya tocaba. Y entre otras cosas me he hecho el olvidadizo. He olvidado el curro, he olvidado gente y he olvidado que me estaba atacando un runrun en el pecho con pinta de topo gordo. El problema de los olvidadizos es que nos dejamos llevar con rapidez, así que alguno de los viajes programados han salido algo atravesado, pero la aventura es lo que tiene. Mis expectativas eran pocas así que, además de un paseo cordobés por algunos de los triunfos de San Rafael, también me he perdido en el Valle de Alcudia y Sierra Madrona, y he hecho un viaje a Osuna donde no la pisado pero me conocido varios pueblos de la campiña, además de ilusionarme con las perdices de los caminos perdidos

Hoy toca volver un poco a la rutina. Recordar que hay una pelea en el curro para no ser unos pringados, Devolver un comic a la biblioteca, tomar un café con el infante y recibir uno de esos besos por hacer la comida estupendamente que preludian una siesta mas que decente con final feliz. 


Hay jaleo. Siempre lo hay. Lo que tengo que recordar es que no va a poder conmigo. Sobre todo esta mierda de jaleo que no llega ni a bullicio.  






14/9/25

Matalascañas y RTVE

 Estoy viendo Pepe Carvalho. Murio Eusebio Poncela y volví a buscarla en RTVE. Los episodios retratan los ochenta, esa época que tanto mola en las discotecas ahora. Pero lo que mas me llama la atención son los lugares. En el episodio "El mar, un cristal opaco", Pepe está en Matalascañas. ¡Dios no hay quien lo conozca! Recuerdo alguna serie de Torremolinos, y era como cuando yo veraneaba allí, hace cuarenta años y había chiringuitos con techo de cañizo en vez de gastrobares. Matalascañas nunca la he visto así y estoy convencido de que la mayoría de los que puedan leer esto tampoco. ¿Que coño pasó para cargarnos las playas de esa manera? Bueno... ¡Si! Claro que lo se. El boom urbanístico, el querer tener piso en la ciudad y otro en la playa. (El del pueblo nos lo encontramos cuando murieron nuestros padres y lo vendimos pronto.)

Hace poco estuve viendo Juncal. Ni Sevilla, ni Córdoba, han cambiado tanto como los lugares de playa. Y ya no sé para donde hay que tirar para encontrarme con algo auténtico. 

9/9/25

Jugarsela

 Jode cuando no hay que escribir. Cuando al final, por tu incompetencia, crees que lo que debes hacer es vivir. Que no hay ganas de coger una página en blanco, de pelearse con ella. Por que de lo que no tienes ganas es de tener que pensar en un historia, lo que quieres es vivirla. Ser tú el protagonista. Acostarte con las extras, matar a un secundario, gritar al imbécil de turno. Has puesto parte de tu vida en relatos pero ahora no tienes nada. Nada que contar. Hace tiempo que tú vida es taaan insulsa que ni si quiera te interesa a tí. Por eso necesitas jugartela. Que la emoción de la apuesta te de la vida que necesitas. Aunque pierda todo. Pero... Ya lo perdiste todo una vez. Ya sabes guardar. Ya no apuestas con ceguera. Siempre queda algo en casa. El problema es que ya ni siquiera te va quedando vida. Y tienes que jugartela donde nadie da un duro por ella. A nadie le interesa. Solo a ti, y a tres o cuatro mas a los que vas a desilusionar no solo si pierdes, simplemente con enterarse de que juegas.  

6/9/25

 Alertagado: Cuando el calor y el sopor te mantienen estático pero esperando algo inminente. 


Bubo dixit. 

5/9/25

Lineas rojas

 En su día quedaron marcadas a fuego. Una señal en la piel que escocía nada mas mirarla. Un aviso de no pasar con barrera incluida. Un recordatorio perpetuo. Una señal luminosa que marcaba la guía a seguir. Pero a las señales luminosas se quedan sin luz, las cicatrices terminan siendo parte de nuestra vida y las barreras, las líneas rojas se difuminan con el paso del tiempo. Creció la hierba, arbustos que taparon las señales, se limpió tantas veces el suelo que descolorío aquella pegatina de: No Trespassing. 

Y las lineas rojas, esas que nos marcan como actuar, las que ni si quiera es necesario que estén por que tú ya las conoces. ¡Tú y todos! Se quedan difuminadas en el paisaje y las obviamos, las cruzamos una y otra vez. No por que no estén si no porque no las queremos reconocer. Y así, como saltimbanquis de lo correcto e incorrecto, seguimos metiendo la pata una y otra vez con justificaciones estúpidas. 

24/8/25

Un caballero

 Por naturaleza, los seres humanos son tan caprichosos, tan complejos, tan maravillosamente contradictorios, que merecen no solo nuestra consideración,  sino también nuestra reconsideración, y nuestra firme determinación de guardarnos nuestra opinión hasta habernos relacionado con ellos en todas las situaciones y a todas las horas posibles.


De Un caballero en Moscú. 

Amor Towles

20/7/25

Plan A

 Me encantan que los planes salgan bien. Decía el cabrón de Hannibal Smith en la serie del Equipo A. ¡Su puta madre! Cuando una toma puedes repetirla veinte veces, cuando un guionista te ha preparado el episodio, cuando eres el protagonista de una serie ochentera que han visto infinidad de gente, cuanto terminas llevandote a la chica en Breakfast at Tiffany´s, cuando te fumas el puro al final... ¡Claro que los planes te salen bien! ¡Cabrón!

El resto de los mortales somos los que tenemos que usar todo un abecedario por partida doble para salvar el dia y no te cuento sobrevivir en Córdoba en verano. 

¡Tus muertos George Peppard!



17/7/25

¡Habrá poesía!

 

... mientras sentirse puedan en un beso
dos almas confundidas;
mientras exista una mujer hermosa.


De Gustavo Adolvo Bécquer.