25/8/17

Afoco

Comenzó a mirar las fotografías de los últimos tres meses. Todas estaban desenfocadas. Miró la cámara, los ajustes, tenía el objetivo limpio, el sensor impoluto... todo estaba correcto. Fue entonces cuando descubrió que todas era posteriores a la fecha en la que ella se fue. Nada tenía que ver con la maquina que llevaba. Le había desenfocado la vida.
Foto de Juanka Casas

8 comentarios:

  1. Respuestas
    1. Triste hasta que vuelves a aprender a enfocar. A coger bien la cámara, a seguir tu vida sin que nadie te ajuste el visor.

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  2. ¡Qué bonita metáfora! Nuestra percepción del mundo a través de la camara fotográfica de nuestras emociones.

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    1. Gracias Ángeles. Me gusta la fotografía, así que de vez en cuando cae algo con ese tema.
      Odiaba las fotografías desenfocadas antes ahora me gustan, no las busco pero tampoco las borro. (Claro que en el tema de borrado de fotos tengo un serio problema.)

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  3. mi vida no hay quien logre enfocarla bien, creo que para ello he de comprar una cámara nueva

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    1. Nada de cámara nueva. Hay que saber que juego puede dar la que tenemos. Quizá no sea "la hostia" pero si sabemos sacarle partido seguro que "enfoca" como queremos. (O terminen gustandonos los desenfoques.)

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  4. Tras que se marcha, le arruina el arte... ¿Existe persona peor?

    Saludos,

    J.

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