Subió los diez pisos hasta la azotea. Tenía que alejarse rápido de allí. Miró a un lado y a otro. Nada. Entonces levantó la vista como una súplica.. Silbó e hizo aspavientos mientras se acercaba al borde.
- Sáqueme de aquí. – Pidió.
La nube lo acogió y el viento empezó a soplar.
UN LUNES PARA SENTIRSE PLENA
Hace 10 horas
has vuelto a beber!!
ResponderEliminaryo ayer tuve que lidiar con los que regresaban de la cata del vino... y ahora contigo..
vaya tela.....
besos.
Entramos en Mayo!!! ¿Qué quieres?
EliminarEs como un "trágame tierra" pero a la inversa, en las alturas, a lo lejos, bien lejos.
ResponderEliminarSaludos,
J.
Perderse es lo importante. Por mar, tierra o aire.
Eliminar¿Una nube tóxica, quizás?
ResponderEliminarDesde que vi la película del hombre menguante no me gustan nada las nieblas mañaneras.
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