"Quise entonces -porque querer es siempre algo que hago sin darme cuenta- tirarme a sus pies y mirar de rodillas su inmenso cuerpo de nogal, con cuya madera construiría la cuna de nuestros hijos, que no nacerían nunca porque no somos tan crueles..."
La ciudad de los olores
Hace 4 horas
muy profundo y bonito...
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