Se me ha escapado un “tequiero” en la habitación. Pensé que con el sueño, la oscuridad, nadie lo notaría. Pero volaba bajo y ha sido imposible ocultarlo, se ha posado en la estantería, en la mesilla, se ha balanceado en la lámpara, toda la puta noche volando de un lado a otro y lo peor, ha cantado junto a la almohada. He abierto la ventana pero no se decide a salir. Sigue en el cuarto, recordándome que lo dejé escapar.
VENTIUNO DE DICIEMBRE: "TRANSPARENTE"
Hace 6 horas
quizás no se te escapó... quizás querias que se escapara...
ResponderEliminarEso es que está esperando a que lo recojas. Se ve que no sabe muy bien hacia donde ir.
ResponderEliminarEso es que cuando tienes sueño dices cosas que son verdad, como cuando estás borracho.
ResponderEliminarYo me quiero dar de bofetadas las veces que se me ha escapao...
ResponderEliminarPero lo voy controlando y ya no me tangan. Voy sobre seguro.
Deberíamos tener una nube de ellos volando en bandada sobre nuestras cabezas.
ResponderEliminarMecachis.
Juana... quizá.
ResponderEliminarPaseante... los "tequiero" si deben saber donde ir. Distinto sería los "hostiaquepolvotieneesa".
Iren... ¡¡Borracho!! ¡¡Con Sueño!! Debemos ser transparentes.
Fiebre... tampoco es para tanto. Hay están. Tampoco son eternos.
Tesa... Como los tengamos volando encima seguro que están diarreicos y nos dejan la chaqueta asquerosa.
Hay que tener mucho cuidado con ellos. En cuanto encuentran el mínimo espacio por el que pasar, se escapan sin vuelta atrás.
ResponderEliminarMe encantó el texto
Gracias Alís.
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarHay que dejar volar los te quieros; de todas maneras acaban escapando ¿Para qué encarcelarlos?
ResponderEliminarOjala yo tuviera mas te quieros revoloteando por mi cuarto al despertar...
Me ha gustado más su post que el mío... le dejo un abrazo acompañando sus dos palabras :)
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