Tenía la mano mas grande del pueblo. Así que cuando daba una hostia las daba como panes. Lo sé porque yo me lleve varias. La última cayó ayer. Así, sin venir a cuento. Tampoco necesitaba dar explicaciones. Y después de llevártela ni siquiera las pedías.
Tenía la mano mas grande del pueblo. Ahora esa mano la tengo yo.
No me lo tenga en cuenta. Es de estas cosas que salen sin buscarlas y pasa lo que pasa.
ResponderEliminarCercenar es una palabra que me gusta. Que no el significado.
Mi madre la usaba mucho cuando yo era pequeño: ¡Daniel, te has portado mal, te irás a la cama cercenar!
ResponderEliminar(Perdón)
Perdonado. Pero uno y no mas. El próximo que sea bueno.
EliminarEs que lo difícil de la hostia a tiempo es discernir cuál es el tiempo correcto
ResponderEliminarHay gente que la merece a cualquier hora.
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