30/8/19

Kdmos








29/8/19

El saber no ocupa lugar. (¡Y una mierda!)

Quince años antes, mi vida hubiese sido mucho mas fácil si el libro electrónico lo hubiesen sacado quince años antes. Tantas cajas de libros en una mudanza dan para muchos quebraderos de cabeza y puede que alguna columna vertebral.

Bubo dixit.

19/8/19

No te preocupes, no muerde.

Me da igual que sea todo lo "mansico" que quieras. ¡El cocodrilo lo sacas de aquí!







18/8/19

10 años.

Creo que alguna vez lo he dicho, me convenció Tesa. Yo era mas de wordpres pero por una u otra razón me faltaba algún sitio mas privado, uno para llorar a gusto, para cagarme en los muertos de la gente que me fastidiba o solo para reírme a gusto sin que nadie me mirase raro. El caso es que ya van para diez años y... ¡Joder! Aún no se como ha salido tanta tontería. Y lo peor es que ahí sigo, sin pensar en otros diez pero, escribiendo para mi, para llorar o quejarme, como ahora, de lo mal que lo hago, de lo vendido que tengo el blog, para llorar o reír, y para mandar a la mierda a todo imbécil que no me cuadre. 

Es curioso, en vez de un relato empecé con una cita. Una de esas de imprescindibles de Juan José Millas. Y después, en el mismo día, un micro. (Un relato penoso, pero ahí está.)
Bueno, lo dicho. Que cumple años el "Café del Búho" (Versión Bloguer.)

https://cafedelbuho.blogspot.com/2009/08/convicciones.html

Me la pido de regalo.



17/8/19

Flirteos de otra época.


Aprendimos el lenguaje del abanico para poder conquistar a una mujer. 

¡Nos ha jodido el aire acondicionado! 

Bubo dixit.


11/8/19

11 de agosto de 2019

Corre el agua de la fuente
y ella por los renglones de su libro.
Corren fotos en la pantalla
y a veces, con suerte,
corre brisa fresca.
Corre el tiempo,
más bien vuela,
cada vez que se arregla el pelo.
Y las cervezas,
¡oh las cervezas!
Corren, botellines abajo,
 que se las pelan.
Corren la sombras
pronosticando el sol.
Y corren, corren tanto
las ganas de besarla
que ya no las aguanto.
En Santa Ana, Priego.

7/8/19

Campana.


A un lado y al otro del abismo
a una salida de tuerca del
salto al vacío.
Columpiándome en la torre.
Gritando fuerte
sin saber siquiera que anuncio.
Si la felicidad de un niño
regresando a las manos del padre,
o el miedo al abismo
de ver, a la misma distancia,
el cielo y el suelo.
Una y otra vez,
y sigo
como una campana.
Campana de San Torcuato. Guadix.