Prefiero el cine.
Prefiero los gatos.
Prefiero los robles a orillas del Warta.
Prefiero Dickens a Dostoievski.
Prefiero que me guste la gente
a amar a la humanidad.
Prefiero tener a la mano hilo y aguja.
Prefiero no afirmar
que la razón es la culpable de todo.
Prefiero las excepciones.
Prefiero salir antes.
Prefiero hablar de otra cosa con los médicos.
Prefiero las viejas ilustraciones a rayas.
Prefiero lo ridículo de escribir poemas
a lo ridículo de no escribirlos.
Prefiero en el amor los aniversarios no exactos
que se celebran todos los días.
Prefiero a los moralistas
que no me prometen nada.
Prefiero la bondad astuta que la demasiado crédula.
Prefiero la tierra vestida de civil.
Prefiero los países conquistados a los conquistadores.
Prefiero tener reservas.
Prefiero el infierno del caos al infierno del orden.
Prefiero los cuentos de Grimm a las primeras planas
del periódico.
Prefiero las hojas sin flores a la flor sin hojas.
Prefiero los perros con la cola sin cortar.
Prefiero los ojos claros porque los tengo oscuros.
Prefiero los cajones.
Prefiero muchas cosas que aquí no he mencionado
a muchas otras tampoco mencionadas.
Prefiero el cero solo
al que hace cola en una cifra.
Prefiero el tiempo insectil al estelar.
Prefiero tocar madera.
Prefiero no preguntar cuánto me queda y cuándo.
Prefiero tomar en cuenta incluso la posibilidad
de que el ser tiene su razón.
Wislawa Szymborska.
(A algunos les gusta...)
Esa tiene nombre catalán, jeh.
ResponderEliminarPues si, "talmente": Polaca.
Eliminarjijiji
EliminarADOLESCENTE
ResponderEliminar¿Yo, adolescente?
Si de repente, aquí, ahora, se plantara ante mí,
¿tendría que saludarla como a una persona próxima,
a pesar de que es para mí extraña y lejana?
(...)
Somos tan diferentes,
pensamos y decimos cosas tan distintas.
Ella sabe poco,
pero con una obstinación digna de mejores causas.
(Que tenga buen viaje :))
Menos por sus preferencias por el cero y otras cosas que no comento, estoy de acuerdo con esta mujer...me cae bien.
ResponderEliminarTe caía.
EliminarUsted perdone
EliminarYo ni idea de quién es, voy a buscar a ver.
ResponderEliminarA mi me la enseño una de mis hermanas hace unos años. Me gustó pero no he podido encontrar una poesía que tiene a un acto terrorista.
EliminarMagnifica poeta polaca...abrazos
ResponderEliminarhay que ver las cosas tan buenas que tienen los polacos, la tipa esta, el papa antiguo, hasta un vodka que me trajeron de Varsovia que estaba de vicio
EliminarA mí me gusta...
ResponderEliminarA algunos,
Eliminares decir, no a todos.
Ni siquiera a los más, sino a los menos.
Sin contar las escuelas, donde es obligatoria,
y a los mismo poetas,
serán dos de cada mil personas.
Les gusta,
como también les gusta las copas con los amigos,
como les gustan los cumplidos y el color verde y gris,
como les gusta las viejas zapatillas,
como les gusta salirse con la suya,
como les gusta acariciar al gato.
La poesía,
pero qué es la poesía.
Más de una insegura respuesta
se ha dado a esta pregunta.
Y yo no sé, y sigo sin saber, y a esto me aferro
como a un oportuno pasamanos.
(Por su puesto, esta no es la original, pero me mola para ti.)
UN TERRORISTA: ÉL OBSERVA
ResponderEliminarLa bomba explotará en el bar a las trece veinte.
Ahora apenas son las trece y dieciséis.
Algunos todavía tendrán tiempo de salir.
Otros de entrar.
El terrorista ya se ha situado al otro lado de la calle.
Esa distancia lo protege de cualquier mal
y se ve como en el cine:
Una mujer con una cazadora amarilla: ella entra.
Un hombre con unas gafas oscuras: él sale.
Unos chicos con vaqueros: ellos están hablando.
Trece diecisiete y cuatro segundos.
Ese más abajo tiene suerte y sube a una moto,
y ese más alto entra.
Trece diecisiete y cuarenta segundos.
Una niña: ella va andando con una cinta verde en el pelo.
Sólo que de repente ese autobús la tapa.
Trece dieciocho.
Ya no está la niña.
Habrá sido tan tonta como para entrar, o no,
eso ya se verá cuando vayan sacando.
Trece diecinueve.
Y ahora como que no entra nadie.
En vez de entrar aún hay un gordo calvo que sale.
Pero parece que busca algo en sus bolsillos y
a las trece veinte menos diez segundos
vuelve a buscar sus miserables guantes.
Son las trece veinte.
Qué lento pasa el tiempo.
Parece que ya.
Todavía no.
Sí, ahora.
Una bomba: la bomba explota.
¿Es ese?.. Gracias por descubrírmela porque me ha encantado...
ResponderEliminarEsa misma. Gracias a ti por volver a enseñarmela. Tambien me gusta mucho. (Ya lo había dicho ¿nooo?)
EliminarComo dirían los Antílopez: "prefiero tantas cosas que no están bien vistas preferir..."
ResponderEliminarYo tenía el placer de conocer a esta dama, pero con la frase: prefiero lo ridículo de escribir poemas a lo ridículo de no escribirlos, me ha ganado.
Si es que, en el fondo, uno tiene su vena lírica.
Cuídate, crack!!
Me tengo que buscar de nuevo los "Antílopez"para darles el tiempo que se merecen. Los escuché en Córdoba una vez y me gustaron, pero claro también me gustó la cerveza, la tía con la que iba... de esas noches completas.
EliminarY si, en el fondo, al menos los bloguer, tenemos esa vena lírica. Intentar decir tanto en tan poco.
oye, estoy desconcertada con esto de las preguntas y respuestas?? es algo nuevo de blogger??
ResponderEliminarla gente se aburre y hace listas larguíiiiisimas....
Yo le estoy encontrando el punto. Además para comentar el comentario de una persona es mucho mejor. Si quieres contrarestar lo que dice Jart, o Iren, pues vas directa allí y respondes tu misma. No se, lo mismo después es un coñazo, a mi me mola. De momento.
Eliminarme gusta ésta tia...será porque és polaca, jejejejeje
ResponderEliminarjeje, tú como Hugo y Porcia ¿Noo?
EliminarLas palabras justas y las ideas lúcidas: más no se puede pedir.
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